dimecres, 18 de febrer del 2009

¿Continente o contenido? ¿Contenido o continente?


¿Qué es más importante? ¿El continente o el contenido?
Se supone que el contenido, pero el continente influye mucho...
¿Se puede cambiar un contenido sin cambiar su continente?
¿Es necesario e imprescindible cambiar un continente para que mejore su contenido?

En otras palabras, me he lo he planteado muchas veces, y lo he discutido tantas otras.
Muchos creen que sí, que para cambiar algo interno hay que cambiar lo externo también. No sé si es absolutamente necesario, pero no puedo negar que probablemente ayude. Un entorno distinto hace que no nos sea tan difícil ser distintos, o ser como se supone que realmente queremos ser.
¿En estos casos que ha cambiado? ¿El contenido o solo el continente? Se supone que ambas cosas, pero no siempre me queda claro que realmente sea así (¡y podría poner un claro ejemplo!). Creo que cuando el contenido vuelve a su viejo continente las aguas vuelven a su cauce. En algunas cosas habrá cambiado, pues cualquier nueva experiencia en nuestra vida nos cambia, por poco que sea, cada día somos un poco distintos al día anterior, no creéis?
¿Pero realmente habrá encontrado aquello que buscaba en la otra punta de mundo? ¿O lo podía haber buscado y encontrarlo mucho más cerca?

Jueves pasado unas buenas amigas me iniciaron en un mundillo extraño (y sin ir fumada, eh! Ja ja ja) de cómo tu mismo puedes ser capaz de cambiar tantas cosas, pues tu realidad eres tu mismo.

3 comentaris:

Sergiopr ha dit...

Segun tu lo planteas, yo creo que lo que influye en las personas a la hora de plantearse un cambio en su vida es el continente, no el contenido. El contenido es flexible y moldeable y se va adaptando a las diferentes formas que le va pidiendo el continente, realmente cuando se realiza un cambio grande en nuestras vidas viene producido por un cambio grande en nuestro entorno, dicese de continente. Esto me recuerda al compendio del ensayo sobre el entendimiento humano, de John Locke (el de perdidos no, el filosofo) en ese libro analizaba que es lo que ha hecho al hombre evolucionar la mente, si la capacidad de tener un cerebro como el que tiene, o la capacidad de manipular los instrumentos con estas dos manitas que nos han dado, en el libro razona que la mente es una "rassa tabula" (o como coño se escriba) y que realmente gracias a nuestra interectuacion con el exterior podemos ir llenando nuestro cerebro de informacion e ir avanzando en nuestra evolucion.
Asi que esto viene a ser algo parecido, ya sea la mayor de las catastrofes personales, o la mas completa apatia diaria son las que nos llevan a plantearnos cambios en nuestra vida, pero siempre propiciados por una respuesta exterior hostil. Aun asi siempre esta el ejemplo de la persona que un dia decide realizar cambios sin ninguna aparente razon, pero eso no es del todo cierto, simplemente su personalidad tenia ese interes latente y en ese momento es cuando ha decidido sacarlo al exterior. O simplemente se ha cansado de ver telecinco y a apagado la tele.

in-nocent ha dit...

Veo que es mucho más complejo, y que como pasa en muchas cosas todo depende des de la perspectiva en la que se mire.
No puedo negar que el continente marca el contenido (justamente este año que Darwin está tan de moda, que mejor forma de demostrar la necesidad de adaptarse) pero yo lo miraba des de la cantidad de posibilidades que puede ofrecer un continente y de lo poco que a veces lo aprovechan los contenidos.
O de qué fácil es culpar al continente de los problemas del contenido, cuando no tiene porque ser así, en parte el contenido también modela al continente, no?
Y en cuanto al cambio (bonita y compleja palabreja…) puede ser un estímulo del continente pero es el contenido quién tiene que dar el paso. Y para cambiar, no crea que sea del todo necesario cambiar el entorno, sino más bien la actitud, que suele ser lo más costoso.

365 sonrisas ha dit...

Absorbe el contenido para que después te absorba el continente